El asunto de los “verificadores” es la mayor tomadura
de pelo que se recuerda en los últimos tiempos en España. Cobrando sus buenos
dineros vienen, nos leen un comunicado, nos muestran un vídeo y se quedan más
frescos que una lechuga. En el vídeo se veían a dos terroristas junto con ellos
y sobre una mesa tres pistolas, cartuchos, explosivos y artilugios para su
fabricación. Otro de los chistes de estos payasos de la verificación es la
declaración que han hecho ante el Juez Ismael Moreno, diciendo que una vez
grabado el vídeo, los terroristas volvieron a recoger el material, lo metieron
en una caja y se lo llevaron, dando su palabra de que no lo volverían a
utilizar. Para estos personajes de sainete eso fue suficiente y así “verificaron”.
Como se puede apreciar, todo surrealista. Sería
de risa sino estuvieran detrás más de 800 muertos que a lo largo de los años
causaron los terroristas de ETA. Pero aún lo más lamentable de todo han sido las
posturas del PNV y del PSOE del País Vasco, ambos poniéndose de parte de los “verificadores”
diciendo que no se les critique ya que están trabajando a favor de la paz.
Desde luego de vergüenza.
Que esa postura la adopte el PNV no es de extrañar,
ya que su tibieza con ETA ha sido siempre conocida, pero que el PSOE adopte la
misma postura es ya de aurora boreal y el colmo de la desfachatez.
El líder del PSOE Alfredo Pérez Rubalcaba no
se ha manifestado de momento sobre este particular pero debería hacerlo cuanto
antes para que la postura del partido quede nítida. Si no dice nada o da como
bueno el comunicado del PSOE del País Vasco su coste electoral va a ser
importante y la calificación moral que merecería sería nefasta.
Los ciudadanos deben tener muy en cuenta esta
actitud y obrar en consecuencia en las urnas en todas las elecciones que se aproximan.
No se puede poner una vela a Dios y otra al diablo al mismo tiempo.
Pero a nadie le extrañaría que el PSOE
apruebe el “trabajo” de los bien pagados verificadores internacionales, que no
sabemos que han verificado. Lo único que si se verificaría sería la verdadera
cara del PSOE.
